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El cáncer de cuello uterino o cáncer cervical se origina en las células que revisten el cuello uterino, la parte inferior del útero (matriz). Puede ser detectado en sus etapas iniciales, y en ocasiones hasta puede prevenirse por completo mediante las pruebas programadas de rutina para la detección.
Estas pruebas son la prueba del VPH (virus del papiloma humano) y la prueba de Papanicolaou, que pueden hacerse por sí solas cada una, o ambas a la vez (prueba conjunta).
Es un procedimiento en el que se obtienen células del cuello uterino, que se fijan sobre un portaobjetos y se tiñen, con el fin de observarlas cuidadosamente en el microscopio y determinar si hay cáncer o precáncer.
En este caso, se analiza la presencia de ADN del Virus del papiloma humano en muestras de células obtenidas del cuello uterino mediante la prueba qPCR (Reacción en cadena de la polimerasa cuantitativa).
Previo a la qPCR se debe realizar una extracción del ADN de la muestra celular. Este proceso varía en función del Kit de extracción que se emplee, pero generalmente consiste en adicionar sucesivamente una serie de reactivos y realizar centrifugaciones en cadena, primero a baja intensidad (<2.500 RPM) y luego a mayor intensidad (>10.000 RPM), que culminan con el aislamiento del ADN de interés.
Para esta etapa de centrifugación, nuestro equipo Cyto 22, específicamente diseñado para aplicaciones de oncología, citología, hematología, virología y microbiología, es ideal para los procedimientos de detección del cáncer cervical. Su manejo sencillo reduce significativamente el tiempo de operación, una característica imprescindible para con alto volumen de muestras.
El ADN aislado tras el paso de centrifugación será procesado mediante qPCR y se determinará entonces la presencia y la cantidad de carga viral en la muestra tomada, alcanzándose así un diagnóstico.
Realizar un diagnóstico temprano del cáncer cervical puede mejorar significativamente las posibilidades de un tratamiento efectivo y prevenir la progresión de la enfermedad.
Para detectar el VPH con la prueba qPCR, se necesita pasar por un proceso de centrifugación. Este paso de centrifugación, que implica etapas a diferentes velocidades, garantiza la pureza y calidad del ADN extraído, permitiendo una detección precisa y fiable mediante qPCR.
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